Corazón sagrado de mi Patria
Personalidad apasionante, potente, además de patriota ejemplar, en sus frases se advierte, tenacidad, convicción, altruismo y empatía, “La vida es nada si la libertad se pierde"; "deseo ardorosamente el mejoramiento de los pueblos"; "el miedo sólo sirve para perderlo todo"; "fundar escuelas es sembrar en las almas" y "no busco glorias sino la unión de la Patria", frases que hoy siguen vigentes más que nunca, porque Belgrano a diferencia de otros, es parte de un proceso colectivo y ahí radica su importancia a la hora de situarlo en este escenario histórico.
Manuel Belgrano, fue un hombre que se preocupó más por el otro, por el prójimo, que por sí mismo, realizó acciones buscando el bien común de sus semejantes, por ello esta conmemoraciónnos invita, a repensarlo y a su vez a afirmar su presencia, estono es un homenaje es testificar su pasión, su entrega total a nuestra patria.
Estas palabras tienen como propósitoesencial reflexionar sobre la imagen de Belgrano, no de manera tradicional como nos tiene acostumbrado el imaginario colectivo, pensando en la creación de la bandera y las insignias patrias, sino humanizar al héroe, al prócer, deconstruirlo, habilitar miradas desde el presente. Las nuevas discusiones históricas, la escuela en tiempos de pandemia, el contexto, la sociedad misma que se interpela ante nuevos interrogantes y busca reescribir susmemorias, estos tiemposasí lo que requieren y ello nos permitirá comprenderla intención de sus actos, defectos, virtudes, en definitiva, un hombre de carne y hueso, como muchos, pero que apostaba a construir una nueva identidad criolla, en medio de un futuro incierto.
¿Intelectual por excelencia o formación?
Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, fue uno de los pocos próceres de mayo que, gracias a la buena posición económica de su familia, tuvo la oportunidad de estudiar en Europa, en la prestigiosa Universidad de Salamanca, de allí logróser un representante importante del conjunto de ideas renovadoras que se empezaron a difundir en Europa y en las colonias durante el siglo XVIII. En su estadía en España entre 1786 y 1793, recibió influencia de los iluministas españoles, italianos y de la Revolución Francesa, ideales que lo llevarían a pensar y buscar materializar las ideas de libertad política y religiosa, de republicanismo, de exaltación de los derechos del hombre. Belgrano se acercó a la economía política concurriendo a una academia extracurricular fundada en 1787 por el profesor Ramón Salas y Cortes, en la que trabajaban las ideas económicas de Antonio Genovesi, referente del Iluminismo Italiano. De espíritu inquieto, asistió a tertulias donde se debatían las ideas de Benito Gerónimo Feijoó, Pedro Rodríguez de Campomanes y Gaspar Melchor Jovellanos, los pensadores del siglo XVIII.
¿Economista por vocación?
El teórico que más influyó sobre Belgrano fue François Quesnay, creador de la fisiocracia, la teoría económica más asociada con la Revolución Francesa.
Él que fue un gran admirador de la fisiocracia en sus épocas de estudio en Salamanca, donde apuntaba a lograr el aprovechamiento de los terrenos existentes de una manera racional, sin desperdicios. Su idea sostenía que la producción agraria permitiría el posterior crecimiento de las actividades secundarias para alcanzar una economía autosuficiente.Al respecto dirá … “La tierra es la madre fecunda”, mientras que la agricultura “es la única fuente absoluta e independiente de riqueza” …
El análisis de sus escritos revela que al tomar contacto con la realidad americana su idea de productividad es más amplia que la de los fisiócratas que la habían reducido a la agricultura. El mismo fervor que pone para defender la actividad del campo, lo pone en la industria y el comercio.“Fomentar la agricultura, animar la industria y proteger al comercio”. Belgrano publicó, analizó y sostuvo con ahínco estas ideas, cuando era secretario del consulado de comercio en informe y memorias, en los que indicaba como se podía lograr el desarrollo económico de la región. También propuso lacreación de la Escuela Especial de Náutica, que fue inaugurada en 1799 e impulsó también la enseñanza de dibujo, idiomas extranjeros, medicinas y química.
Pese a que la historia lo recuerda con traje militar, Manuel Belgrano fue esencialmente economista, educador y periodista.
Progresismo Educativo: un avanzado para la época
Los problemas de la educación en la etapa colonial no estuvieron en los ojos centrales de los revolucionarios independentistas, sólo en unos pocos como Moreno, Castelli, Monteagudo y Belgrano. Quienes influenciados por la ilustración leyeron en las tertulias obras de Voltaire, Rousseau, Locke entre otros, pretendiendo encender la llama reflexiva y critica. Muy atinadamente Carina Cabo, doctora en Ciencias de la Educación a cargo de la Secretaría de Cultura y Educación de Rosario, considera que Belgrano fue el primero en plasmar en el plano educativo las ideas de la Revolución Francesa, siempre novedoso, vanguardista, aportando y pensando en los otros.
Belgrano insistía en que uno de los principales medios para mejorar las condiciones de vida de los sectores más postergados era crear escuelas gratuitas, y debían incluir a las niñas. Sostenía que los jueces debían obligar a los padres a enviar a sus hijos a la escuela. A su vez, amplió la visión acerca de los nuevos sujetos pedagógicos; creía que todos debían acceder a la educación: los desposeídos, los indios, los huérfanos y los pobres. Belgrano hizo un gran aporte educativo, eso no se puede negar, pero como todo contexto a tener en cuenta, la época colonial estaba atravesada por estructuras tradicionales, aun así, el pensamiento belgraniano puede ser considerado como precursor al de Sarmiento y sentó un antecedente en el virreinato del Rio de la Plata.
¿Militar por obligación, deber patrio o circunstancia?
Belgrano será considerado por los distintos escritores, como un militar flojo, que tomo malas decisiones, cuestionado por el mismo triunvirato por las batallas que perdió, y será relevado del cargo. Sus intervenciones militares son desde las invasiones inglesas hasta hacerse cargo del Ejercito del Norte en las guerras por la independencia, era un hombre comprometido que enfrentaba el miedo.
En septiembre de 1810, fue nombrado al mando de un ejército destinado a la Banda Oriental, sin embargo, su gran amor a la patria lo llevó a que también se pusiera al mando de Santa Fe, Corrientes, Misiones y el Paraguay. Organizó el cruce del río Paraná construyendo balsas de madera y cuero para trasladar soldados, municiones y algún cañón, como también no dudo en mandar a fusilar a los primeros desertores de la guerra, o cuando respondió ante las ordenes de Buenos Aires de mandar a fusilar a nuestro precursor de la autonomía provincial, Juan Francisco Borges, ¿podríamos cuestionarlo con decisiones de la guerra?, estos son los interrogantes que quizás muchos nos preguntamos en este 2020, como afirma el historiador Gabriel Di Meglio: “cada generación ve a su pasado en función de su presente”.
Belgrano y Santiago del Estero: ¿Cuánto de herencia materna?
De raíces santiagueñas, provenientes de doña Juliana Alva Bravo de Zamora (tatarabuela) y de Lucia de Islas y Alva (bisabuela) de Juan Manuel Gonzales Islas (abuelo) y sobre todo de María Josefa González Casero (su madre), cuentan los especialistas de las Biografías de Belgrano, que fue una mujer fuerte, ya que tuvo que enfrentar las acusaciones de su marido y llevar adelante un hogar de familia numerosa.
En sus campañas al norte, Belgrano, debió seguir la ruta de postas y atravesar innumerable cantidad de veces nuestra provincia. En pocas ocasiones se detuvo y descansó en la Villa Loreto en el Yugo, que pertenecía a la familia Islas, rama materna, del general Belgrano. Pero no es el único lugar que visitó aquí, el 18 de marzo de 1814 llegó el general a la posta de Vinará y desde allí solicitó su baja al gobierno por razones de salud. Al mes siguiente, arribó a nuestra ciudad nuevamente y desde aquí escribió al general San Martin y luego volvió a Loreto, el gobierno declaró por esta razón por decreto N° 112.099 el 24 de enero de 1942, “lugar histórico”.
Este gran hombre, siempre movido por su empatía, destinó el dinero que el gobierno recompensó por sus triunfos, a la fundación de cuatro escuelas, una de ellas en Santiago del Estero, por lo cual nuestra provincia siempre lo gratificó y erigióen su memoria una columna conocida como “Pirámide de la Libertad” en el centro de la actual plaza Libertad, el 9 de Julio de 1865, luego se la demolió y se construyó en 1912 durante el gobierno del Dr. Antenor Álvarez , la estatua ecuestre que todos conocemos hoy y fue preparada en un taller de escultura del señor García, en Buenos Aires.
Patriota Inmortal
Hoy al cumplirse 200 años de su paso a la inmortalidad, su espíritu seguirá vivo, mientras recojamos y llevemos a la victoria siempre la voluntad y el accionar como ciudadanos de hacer grande nuestra patria, dentro de un proyecto colectivo, como fue la creación de la bandera, la revolución, las guerras de independencia y sus ideas en pos del bien común, construyéndonos libres, soberanos y justos.
Poco antes de morir,sostuvo“Pensaba en la eternidad donde voy y en la tierra querida que dejo. Espero que los buenos ciudadanos trabajaran para remediar sus desgracias”.El mejor homenaje que podemos hacer a nuestro prócer, es mantener unida aquella bandera que nos legó, símbolo de lucha, gloria y justicia.
“¡AY, PATRIA MÍA!”
Equipo UNSE Licenciatura en Historia
Tesistas: Evangelina Isac Karina Roldan y Eugenia Hernández Reimundi
Ilustraciones: Roberto Eberlé, artista plástico, escultor y profesor